Cuando se despertó, su madre todavía
estaba allí. Su madre le dijo que se marchaba para no volver. Y su hija,
Jacinta, se echó a llorar. Jacinta quería irse con su madre. Pero su madre,
Rosa, tenía un secreto que no quería que Jacinta supiera.
Entonces, su
madre ató a Jacinta en una silla para que no la siguiera. Rosa se fue y cerró
con llave la casa. Tiempo después, llegó el padre de Jacinta a casa y desató a
su hija. Manolo le preguntó a su hija que por qué estaba atada. Después de que
Jacinta le contara todo a su padre decidieron salir a buscarla. Cogieron el
coche y se dirigieron al bosque. Cuando se introdujeron en el bosque, les
atacaron unos indígenas. Los capturaron y los llevaron a su poblado, que estaba en el interior del
bosque.
Al llegar,
se dieron cuenta de que no eran indígenas, si no unos sicarios disfrazados. El
secreto de Rosa era que se había convertido en la jefa de la banda de sicarios.
Al ver a su marido Manolo le mato cortándole la cabeza con un hacha. Jacinta
preguntó a su madre que por qué lo había hecho y ella le confesó que estaba
enamorada de un sicario porque era muy yiske. Y en ese momento llegó el maromo
de su madre y a Jacinta no le dio buena espina. Rosa le dijo a Jacinta, que a
partir de ahora José iba a ser su padre. Jacinta amenazó a su madre con
denunciarles a la policía. Rosa decide matar a su hija Jacinta porque cree que
será un impedimento para su relación con José.
Jacinta, en
un descuido de su madre, salió corriendo y llegó al coche de su padre. Jacinta
abre con las llaves el coche y conduce hasta la comisaría. La comisaría estaba
completamente vacía. Jacinta estaba esperando en la puerta, cuando José
apareció con un arma… CONTINUARÁ…
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