La Bruja Hambrienta

Ayer, viernes 14 de marzo, el colegio Santamaría se fue de excursión al monte Lomar. Primero se subieron en el autobús los niños, que se pusieron atrás del todo del autobús y después las chicas, que se sentaron delante de los chicos.

Para empezar la ruta (porque eso era una ruta en la montaña Lomar) los niños y niñas andaron y andaron. Parecía que nunca se acababa ni la ruta ni la montaña, por tanto se empezaron a preocupar los niños/as. Los profesores no se estaban dando cuenta de nada. Sin embargo, los niños y niñas no pararon de andar y tampoco de quejarse por lo cansados que estaban.

De repente, una señora muy mayor apareció de la nada. Todos se asustaron y gritaron mucho. Los mejores amigos, Lucia y Lucas, después de dar un bote hacia atrás, cuando vieron a la señora mayor, se dieron cuenta de que la señora tenía tres verrugas en la cara, la nariz muy grande y fea y el pelo grasiento y sucio. Lucía y Lucas pensaron que tal vez podría ser una bruja. Treinta minutos después la señora se empezó a reír muy extrañamente y tanto Lucía como Lucas se empezaron a preocupar.

Lucía y Lucas, sin que nadie les viera, se escaparon y bajaron la montaña corriendo muy rápido porque ellos creían que era una bruja y que les iba a comer a todos, alumnos y profesores, y efectivamente, ellos tenían razón.

Mientras bajaban la montaña se oyeron muchos gritos de ayuda. Lucía y Lucas no subieron la montaña porque sabían que si subían les iba a comer la bruja.

Finalmente Lucía y Lucas les contaron todo a sus padres y a la prensa, que publicó un artículo sobre lo peligrosa que era la montaña Lomar.

Helena González 1º ESO B