El dios Chalazi, dios de la lluvia, ayudaba a los
habitantes de Dimos para que sus cosechas crecieran, cada poco tiempo les
enviaba la lluvia para regar sus campos. A cambio los hombres debían entregarle
la mitad de la cosecha que obtenían. Pero a los hombres este reparto no les
parecía justo, pues eran ellos quienes realizaban todo el trabajo, decidieron
que a partir de ese momento solo le entregarían la tercera parte de la cosecha
y decidieron enviar a Ekdot, el mensajero, para comunicárselo al dios Chalazi.
Al conocer la noticia Chalazi se enfureció porque consideró que los hombres
estaban siendo egoístas. Por lo que decidió castigar a los hombres destruyendo
sus cosechas. Mientras Ekdot volvía a Dimos el cielo empezó a rugir y se
oscureció de repente, una gran cantidad de piedras de hielo cayeron sobre los
campos y todas las cosechas quedaron destruidas. El castigo que les había
enviado Chalazi para vengarse fue el granizo.
Desde ese momento cada vez que los hombres se portaban
mal Chalazi les enviaba granizo como castigo.
VÍCTOR ALDEA 1º B
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